lunes, 7 de mayo de 2007
En las escuelas de risa enseñan que las técnicas deben estar orientadas a reírse de la situación de los demás y también de la propia.
"Es importante saber reírte con los demás, no de los demás, y aprender a sacar lo mejor de tu risa. En ocasiones, con tan sólo un par de sesiones, una persona puede conocer aspectos de su risa que le pueden ayudar para el resto de la vida".
Hay que tener en cuenta que los profesores no son humoristas, sino técnicos.
Un humorista busca provocar la risa con un chiste o una situación;
los técnicos nos enseñan a reír de la mejor forma posible sin esperar algo gracioso para hacerlo, y se preparan y estudian para ello
Masaje:
La columna vertebral y cervicales, donde por lo general se acumulan tensiones, se estiran. Además, se estimula el bazo y se eliminan las toxinas.
Con este movimiento el diafragma origina un masaje interno que facilita la digestión y ayuda a reducir los ácidos grasos y las sustancias tóxicas. Limpieza:
Se lubrica y limpian los ojos con lágrimas. La carcajada hace vibrar la cabeza y se despeja la nariz y el oído.
Oxigenación:
Entra el doble de aire en los pulmones, de ahí que la piel se oxigene más.
En concreto, los pulmones mueven 12 litros de aire, en vez de los 6 habituales, lo que mejora la respiración y aumenta la oxigenación.
Con esto se desmiente la idea de que la risa provoca arrugas en el rostro, ya que lo tonifica.
Felicidad:
Favorece la producción de endorfinas y encefalinas en el cerebro, que son los neurotransmisores (formados por cadenas de aminoácidos) que se encuentran sobretodo en el sistema límbico y cuya función es combatir el dolor disminuyendo la receptividad del organismo ante estímulos dolorosos; es así como la risa estimula la producción de endorfinas y, por tanto, disminuye la intensidad de los fenómenos dolorosos.
Tantas ventajas no han pasado desapercibidas para nadie.
Incluso organizaciones como Médicos sin Fronteras y Payasos sin Fronteras han hecho de la risa una forma de trabajar con personas que han perdido la sonrisa. La utilizan como terapia para superar otro tipo de problemas, bien de carácter psicológico o de otra naturaleza.
Un ejemplo de ello es el programa Correos reparte sonrisas, que en su tercera edición ha conseguido hacer reír a 1.460 niños en 21 hospitales materno infantiles de toda España.
Otros centros sanitarios, como el Son Dureta en Palma de Mallorca y El Niño Jesús de Madrid, también utilizan el humor en sus terapias, incluso en la Facultad de Medicina de la Universidad de Lleida se ha incluido la asignatura "El humor como herramienta terapéutica".
Ha sido muy comentado el caso de Norman Cousins, un periodista americano al que le diagnosticaron una enfermedad degenerativa de las articulaciones. Cousins haciendo caso omiso de los médicos se autoprescribió un tratamiento muy especial a base de películas de Charles Chaplin y de los hermanos Marx. ¡Meses después su mal se abatía en retirada!.
Lo cierto del caso es que no podemos asociar científicamente una relación causa-efecto, pero si es cierto que se ha dado un gran número de casos en el que el estado de ánimo, ha hecho mejorar considerablemente el estado del paciente.
La explicación psicológica, nos viene dada por los niveles de análisis en la actividad de los organismos.
Nivel bioquímico, nivel fisiológico y por último nivel psicológico.
Estos niveles se influyen entre sí de tal manera que lo fisiológico y lo químico afectan a lo psicológico y, al contrario, lo conductual afecta igualmente a los otros niveles de actividad.
La actividad de una droga puede producir una conducta eufórica y, por el contrario, una emoción puede interrumpir la actividad fisiológica de la digestión.
Concluyendo, me gustaría terminar este artículo citando las palabras del Dr. Rubinstein:
"La risa es un verdadero desintoxicante moral capaz de curar o por lo menos atenuar la mayoría de nuestros males.
Y además, no hay ningún peligro si se supera la dosis."
Enlaces relacionados con el tema:
http://webs.sinectis.com.ar/risaysalud/index.html http://www.enbuenasmanos.com/articulos/muestra.asp?art=662 http://www.consumer.es/web/es/salud/investigacion_medica/2003/01/10/56279.php
